Black & White en su presentación de 375 ml ofrece un whisky escocés suave y bien equilibrado, perfecto para quienes buscan una opción más compacta sin sacrificar calidad. Con una mezcla de maltas ligeras y whiskies de grano, destaca por su sabor suave con notas de miel, vainilla y un ligero toque ahumado. Es ideal para disfrutar solo o como base en cócteles, y su tamaño es conveniente para pequeñas reuniones o consumo personal.
top of page
bottom of page